El Emprendimiento como la escuela de Desarrollo Personal más grande del Mundo

Sin querer queriendo salió este tema.

Hace unas semanas estaba en una sesión de Coaching hablando con mis alumnas de Alquimia de Ventas y de nuestra membresía Digitalmente exitosa sobre todos los aspectos personales que tienen un impacto directo en nuestro negocio, esos de los que pocos o casi nadie habla pero que muy silenciosamente van dejando huella y cuando menos nos damos cuenta ya hicieron un hueco enorme en nuestros corazones y en nuestro negocio: los aspectos de desarrollo personal.

Y es que en mi experiencia, el desarrollo personal que abarca el mindset, el heartset, nuestros comportamientos y acciones, siempre debiera ir antes de emprender, pero la realidad es que no sucede así en la práctica.

Nos enfocamos en trabajar en nosotras de forma interna y personal hasta que ya no podemos avanzar, hasta que algo se traba, hasta que algo sale mal o hasta que no podemos vender más.

Así que hoy quiero poner en la mesa cómo el trabajo interior impacta de forma directa y dura nuestro negocio.

En semanas pasadas, yo también comencé a trabajar en una mentoría y mientras eso pasaba, una de mis alumnas en mentoría me decía uno a uno todo lo que pasaba en su cabeza mientras lanzaba su primer producto digital, así que ahí confirme lo que siempre había dicho: El emprendimiento es una de las escuelas mas grandes de desarrollo personal. No hay forma de que un negocio crezca si tú no creces de forma interior.

Por lo que hay que entender que si ya estás en el mundo de los negocios, a la par de que aprendes como vender, como prospectar, a hacer contenido, a hablar con clientes, a exponerte en redes sociales, hay que meterle duro a la programación mental, a tus creencias limitantes, a tu autoestima, tu autoconcepto y tu autoimagen, porque en el camino nos vamos a topar con situaciones que van a sacar a la luz todo lo que no hemos trabajado ya sea porque decidimos olvidar o porque simplemente, nuestro subconsciente bloqueó.

Si algo de lo que estás haciendo en tu negocio no está saliendo como planeaste te invito a que le eches un vistazo a tu interior y que veas que hay en tu personalidad que puedes reprogramar: tal vez miedos, temores, heridas no sanadas, el merecimiento, abandono, rechazo o cualquiera de esas situaciones que crees que no tienen que ver.

Si postergas alguna acción, alguna charla con tus prospectos o simplemente hacer un post en redes sociales, mira si de “pura casualidad” tienes miedo al rechazo, al abandono o a la critica, al que dirán o a fallar, fracasar defraudar a alguien o no cumplir alguna expectativa.

Si te ha pasado que a todo dices que sí, que no tienes tiempo para tu proyecto o negocio, o si cuando menos te das cuenta ya pasaron semanas y tu sigues en las mismas, sin vender, sin prospectos nuevos o sin una pieza de contenido que tanto querías colgar en tus redes sociales, te invito a que observes si mas bien solo le dedicas tiempo a todo, pero menos a ti porque crees que nada es tan importante como cumplir con lo exterior, a los demás o a “lo que hay que hacer” porque eso te toca.

Si alguna vez o muchas veces te la has pasado comparándote con alguien que tienes resultados como los que tu quisieras, tal vez hay que observar qué tanto conectas con tu valor y reconocimiento por lo que sí has logrado, sin que importe si el logro es pequeño o grande de acuerdo con lo que tu consideras.

El emprendimiento no es una carrera de velocidad, es una carrera de resistencia, porque nuestras sombras se van a ir asomando poco a poco, y el error más grande está en echarle la culpa primero a la estrategia que estás haciendo, luego tal vez a tus mentores y por último a cualquier factor externo, sin que eches un vistazo a lo que tienes en la mente o el corazón.

Es por eso que en esta entrada te invito a que le pongas nombre a eso que te está deteniendo o frenando y sobre todo que hagas un balance real, serio y objetivo entre tu estrategia y los factores interiores tuyos que pueden estar afectando tus resultados, pues en mi experiencia muy pocas veces tiene que ver con el exterior, casi siempre tiene que ver con lo que hay en nuestra mente, nuestras creencias sobre nosotras, sobre el dinero, sobre los negocios, sobre la facilidad, la libertad y hasta sobre la misma felicidad y el merecimiento.

Ahora, cuando te des cuenta de que hay algo interior a lo que ponerle foco, te invito a que lo trabajes en serio, y te advierto de una vez, jejeje, no se “quita o cura” a la primera, de hecho, nunca desaparece, solo se van mostrando nuevas versiones de la situación y por supuesto, tu eres más sabia para afrontarlas.

Y en cuanto al trabajo interior, te sugiero que uses las herramientas y los métodos que mejor te funcionen y resuenen contigo, porque no todo funciona para todas y tampoco funciona siempre para la misma situación, de hecho si te abres a posibilidades más grandes, aparecerán frente a ti herramientas que nunca te imaginaste o consideraste que te pudieran ayudar.

Aquí te nombro algunas que puedes probar, implementar e incluso considerar si nunca lo has hecho, pregúntale a la vida a través de acciones, muévete de lugar y considera acciones pequeñas para ver si esa herramienta va contigo o no:

  • Ejercicio físico, porque genera claridad mental y libera químicos de la felicidad.
  • Rebote de ideas contigo o con otros, puede ser a través de terapia, para escucharte, escuchar nuevos puntos de vista y hasta soluciones posibles.
  • Journaling porque te permite vaciar tu mente, poner en orden tus ideas y clarificar acciones.
  • Cualquier tipo de terapia clínica o alternativa.
  • Meditaciones de cualquier tipo y sanaciones energéticas
  • Constelaciones sistémicas (familiares)
  • Lectura de cartas natales o de diseño humano
  • Cartomancia (lectura de oráculos y tarot terapéutico)
  • Música medicina y frecuencias
  • Códigos sagrados, numerología
  • Coaching y acompañamiento personal

Y esta lista puede seguir, así que haz cuanto consideres bueno para hacer tu trabajo personal, también te puedes apoyar de lecturas temáticas de autores expertos en temas de desarrollo personal para emprendedores.

Me encantará que pronto podamos compartir tu experiencia en este tema y sobre todo, que nos cuentes tus descubrimientos y avances.

Definitivamente el emprendimiento y la mente junto con el corazón son un mar en el que se navega con buenos climas y olas bravas, pero con las herramientas adecuadas para ti, podrás llegar a buen puerto.

Deseo que esta invitación ponga al frente tuyo una nueva visión de cómo resolver alguna situación por la que estás atravesando ahora y puedas darle la vuelta pronto para continuar con este sueño que tanto has cuidado y mantenido.

 

¡Por una vida y un emprendimiento alineados de los que no queramos huir!

 

Con Luz y Amor Cósmico,

-Mar Cespedes.-

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